Dicen los españoles, dueños de
Electricaribe, que entre los motivos que los llevaron a prestar mal servicio eléctrico en la Costa Caribe fue
la falta de pago por los usuarios. María Eugenia Coronado, presidente de Gas
Natural Fenosa Colombia, empresa accionista mayoritaria de Electricaribe, lo
ratifica: que el origen de los problemas son el impago, el fraude y el bajo
recaudo.
En el año 2000 aparecen los españoles
en Electricaribe, y en el 2004 Unión Fenosa Colombia toma el control de las
empresas Electrocosta y Electricaribe, las cuales suministraban eléctricidad a
los 7 departamentos de la Costa. Nada nuevo trajo la consolidación financiera
en manos de Unión Fenosa. Los problemas de racionamiento y cortes que ya venían
siguieron, y el paliativo de Electricaribe fundado en promesas de mejorar nunca
llegó.
En el curso de la crisis se probó que
la empresa no cumplió con los planes de inversión. La brecha entre la calidad
del suministro y el precio del servicio se hizo más distante. Los apagones y
los cortes eléctricos aumentaron lo mismo que el grado de desesperación de la
gente, la protesta siempre terminaba en quema de sedes y bloqueos de vías.
Se inventaron que la empresa se
reventaba financieramente por la cultura del no pago. La Superintendencia de
Servicios Públicos fue tolerante y hasta tuvimos una mujer superintendente que
descaradamente atendió las razones en que se fundaba Electricaribe para omitir
los reclamos. Gracias a que finalmente Electricaribe se hundió por su
incapacidad, negligencia, ineficiencia, explotación y pereza empresarial.
En Montería, sucedió algo similar en
el año 1992. Existía la cultura del no pago. En ese tiempo, las Empresas
Públicas Municipales, era la encargada de atender el servicio de acueducto y
alcantarillado de la ciudad. La clase política de la época la había atrapado,
era la dueña. La junta directiva era integrada por peleles y el gerente lo
imponía el contubernio político local, y lo que quedaba de la plata recaudada
se lo repartían entre liberales y conservadores.
Llegó una
nueva administración municipal del alcalde Juan González Petro; atendió una
asesoría del Departamento Nacional de Planeación que aconsejó un proyecto
novedoso en materia de administración de acueducto y alcantarillado. Se
implantó y se liquidó el esperpento existente. Fue creada lo que es hoy
Proactiva (Proactiva Aguas de Montería S.A. E.S.P). La ciudad superó sus problemas y empezó la modernización de la
infraestructura del acueducto y el alcantarillado. Ante lo cual, la gente
empezó a pagar y se abolió el no pago.
POSDATA: Mañana sábado 1º de abril, el partido Centro Democrático, convocó a una
marcha, que inicialmente era contra la corrupción, pero como muchos de sus promotores
están comprometidos en hechos dolosos, se les ocurrió cambiar la causa y ahora
es contra todo: el proceso de paz con las FARC, la escasez, la inflación, el
salario mínimo, en total una retahila.
(31-03-17)