Edgar Vergara Figueredo
Nadie duda de lo molesto que estaba
el presidente Juan Manuel Santos el día lunes durante el acto de lectura del
memorando de acuerdo de la reunión realizada en Quito entre él y el presidente
Maduro, con la presencia de los presidentes de Uruguay Tabaré Vásquez y Ecuador
Rafael Correa. Sin embargo, los colombianos que habitan la frontera con
Venezuela no quedaron contentos con la conclusión del encuentro.
No obstante que se dio entre los dos
presidentes y que muchos sugerían, quedaron dudas sobre la intimidad del evento
de Quito, la ministra de relaciones exteriores María Ángela Holguín no fue
explícita con la prensa, pues se cree que prefirió la prudencia antes de echar
más leña a la hoguera. Antes del punto final que se creía llegar se convino la
conformación de una comisión binacional para tratar los problemas entre las dos
naciones, la cual debía reunirse en Caracas. De entrada hay escepticismo con
esa delegación.
De lo que verdaderamente debe estar
seguro el presidente Santos es que mientras Maduro esté al frente del gobierno
de Venezuela, no debería confiársele a ese país ninguna gestión nacional del
ámbito diplomático. La experiencia es suficiente, en el pasado Chávez tuvo sus
inconvenientes con el gobierno de Uribe, amenazaba a toda hora con movilizar
tropas hacia la frontera y mandar los cazabombarderos sukhoi en su objetivo de
amedrentar.
Maduro, actúa con peores
despropósitos. Nos trata de hermanos, pues nada de raro en él, igualmente lo hace
con los rusos cuando les va a pedir que le fíen armas y con los chinos cuando
les va a mendigar plata a cambio de empeñar el futuro de Venezuela. Los chinos
no son ningunos pendejos saben que si cae Maduro se quedan con el petróleo del
país.
Para bien de la patria se conoció a
Maduro: hipócrita, doble moral y busca pleitos creando excesiva desconfianza,
antes de montarse en el avión que lo condujo a Quito dio órdenes a sus
lugartenientes de “iniciar las negociaciones para conseguir 12 nuevos aviones Sukhoi en
nuestra alianza con nuestra hermana Federación Rusa y cerrar las negociaciones
con China para los nuevos equipos militares de nuestra aviación militar
bolivariana". Aunque algunos quieren pasar la hoja
de lo ocurrido, lo cierto es que el país debe replantear su estrategia de
política internacional respecto a Venezuela, Maduro no es sincero, es un mal
vecino que salta la cerca para hacer el daño.
POSDATA: Sentenció el profeta de Israel Isaías: “Los malvados nunca están
tranquilos.”
TE RECORDAMOS: Simultáneamente a la firma de la
Iniciativa Democrática de Bogotá y las Américas por parte de 32 ex presidentes
de Latinoamérica y 2 de España, mediante la cual se rechazan los desmanes
antidemocráticos y violatorios de los derechos humanos del gobierno de Maduro,
se firmó en La Habana el Acuerdo sobre Justicia entre el presidente Santos y el
comandante de las FARC Timoleón Jiménez.
(25-09-15)
