Edgar Vergara Figueredo
Sin que los cartageneros se hubieran dado
cuenta, se alzaron con la plata de los colombianos. Hasta ahora que la
Contraloría General de la República publicó el informe sobre el derroche de
dinero en la ampliación de la refinería de Cartagena, la gente quedó
sorprendida. Presidentes de la república, ministros y juntas directivas y
presidentes de Reficar y Ecopetrol, están comprometidos directa o
indirectamente en el desfalco.
La obra de ingeniería, abastecimniento y
construcción de la ampliación de la refinería de Cartagena estuvo a cargo de la
empresa CB&I (Chicago, Bridge & Iron) con sede en Texas. Dice el
informe de la contraloría que provocó el escándalo: “llama
la atención el sobredimensionamiento en la contratación tanto en el aspecto
económico como temporal lo cual hace reflexionar sobre el tipo de
contratación utilizada y el seguimiento y control establecidos por Reficar
S.A.”
De ese reporte se desprende un trípode. La
primera de las patas, el costo de la obra
sobrepasó el valor calculado inicialmente. La segunda, el tiempo de
duración de la obra que debía entregarse en el año de 2012 se aplazó. La
tercera, la ausencia de control por parte de las entidades involucradas,
empezando por Reficar y Ecopetrol.
Así fue que: 1. El presupuesto inicial de la
obra de 3.993 millones de dólares terminó en 8.016, lo cual demuestra un
sobrecosto de 4.023 millones de dólares. En pesos colombianos, la
pendejadita, $13 billones. 2. La obra
debió entregarse en el año 2012 y apenas se hizo en octubre del 2015, cuando
vimos al presidente Juan Manuel Santos pomposamente inaugurándola. 3. Reficar
S.A. tiene seis órganos de control: revisor fiscal, contraloría general de la
república, superintendencia de sociedades, contaduría general de la república,
superintendencia de servicios públicos domiciliarios y la Dian.
Además, ejercen control, las juntas
directivas de Reficar S.A. y de Ecopetrol y sus respectivos presidentes. Con
excepción de la contraloría general de la república que descubrió el entuerto,
en medio de todos estos entes (formados por hombres y mujeres), entró el elefante y no se dieron cuenta. O se
dieron cuenta y se hicieron los pendejos. Al final, el informe que provocó la
algarabía en los medios de comunicación pronto pasará a olvido y vendrá otro a
reemplazarlo. ¡Así es Colombia!
POSDATA: La robadera de dinero para nutrición
de los niños también está en Córdoba como en La Guajira y el Atlántico.
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el 3.4% de los niños menores de 5 años presentan desnutrición global. Y todavía
en los departamentos y municipios siguen pillándose la plata de la alimentación
de los menores, en tanto los pequeños de la Guajira viven con un vaso de chicha
diario.
(05-02-16)
